Naomi tiene un chance. No es mi favorita (ver post anterior), pero me daría mucho gusto verla ganar. Primero, porque sí, y luego, porque su actuación es muy digna. Dejando a parte que el maquillaje y la situación en la que su personaje se involucra le ayuda mucho, Naomi logra convencer. Sí.
Ser madre también la ayudó mucho. Allí, creo, encontró mucha motivación para su papel. Si bien el personaje en el guión es un poco plano para mi gusto, ella, con sus matices, logra darle volumen. Aunque la escena más emocional de la película no le corresponda a ella, Naomi es quien provoca las emociones.
Quizá por eso la única nominación que logró la película es por mejor actriz.
Solo me queda por evaluar a Emmanuelle Riva, pero, por lo visto hasta ahora puedo decir que Naomi tiene un chance más que mi favorita, pero tiene un chance menos que la actriz de quien hablaré en el próximo post.
¿La película? Me dejó un nudo en la garganta. Soy padre. Tengo una hija. No quiero ni imaginarme en una situación similar. Por ello, no voy a comentarla. ¿Recomendable? Véala.
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