Sin miedo a nada

Parezco drogadicto. ¿La razón? Pues, me han extraído sangre dos veces el mismo día. ¿Y?, dirá algún lector, eso es algo de rutina para muchos. Sí, para muchos, pero no para mi. ¡NO!

He perdido el miedo a las agujas. ¿Por qué lo sé? Porque antes, un par de días antes, si me hubieran dicho que debían ponerme una inyección y sacarme sangre ¡dos veces! hubiera salido corriendo del hospital al estilo del correcaminos!


pero hoy no! Asumí mi compromiso con la humanidad... eh... es decir... hoy no tuve otra opción. Ni modo.

Muestro la foto y hago la observación para que nadie piense que estoy haciendole a la heroina, al LCD o similares y para que quede constancia escrita que este día he dejado de temerle a las agujas!