septiembre 11, 2009

Apátrida

Este país es una locura, definitivamente. Y todos los que vivimos aquí, para bien o para mal, estamos locos. Claro, cada cual tendrá una opinión muy distinta de si mismo porque, la locura sólo puede contrastarse con la cordura, y viceversa.

"¡Vivos!", decía el título de la portada del único periódico deportivo del país, ¿la razón? El Salvador ganaba in extremis a la selección de Costa Rica la noche del miércoles.

Esa noche, los gritos de mis vecinos me hicieron recordar a mi tío, Roberto, aquel 31 de diciembre de 1991 cuando, después de escuchar por la radio que el fin del conflicto armado había llegado, se puso a saltar como loco. Esa noche fue la primera vez que lo vi saltar de alegría.

Yo estaba viendo a Brasil ganarle 3 por 1 al mal dirigido equipo de Argentina. No fue sino hasta horas más tarde, viendo un canal deportivo que vi en repetición el gol de Rudy Corrales.

El jugador con el dorsal 9, hizo el gol al minuto 90, un 9 de septiembre (noveno mes) del 2009, y todo esto a las ¿9:00 pm?

O sea, el 9 en el 90, hizo un gol el 9 del 9 del 09, y todo ¿a las 9:00?

Le he preguntado a un amigo a qué hora exacta hizo el gol el Sr. Corrales porque, de ser así como lo he descrito, ese gol no es un gol normal, sino una señal del destino.

Eso significa que la selecta clasificará al mundial. Le ganará a México (Aztecazo) y a Honduras. Llegará a la final del mundial, dejando en el camino a Inglaterra, a España, a Holanda y al final a Brazil. Si, señoras y señores, eso significa que la selección de El Salvador será ¡campeona del mundo!

¿Lo ven? ¿Ven lo que les digo?

Ahora que alguien venga y me diga que estoy loco!

¿Será que ahora si soy salvadoreño?


2 comentarios:

W dijo...

jajaja estas loco!!!

W.
PD. ojalá y tuvieses razón

DEARmente dijo...

@ W: (misterio)