febrero 06, 2009

El Luchador (The Wrestler)


Voy a empezar diciendo que, de no ser por W y sus dotes de pirata cibernético, esta película la hubiera visto, posiblemente, hasta mediados de año. En este país, este tipo de películas pasan desapercibidas. Pero, para eso está W, el amigo de los niños.


Es difícil pensar en esta película sin caer en el paralelismo que hay entre la vida de su protagonista y el personaje de la cinta, Randy 'The Ram' Thompson, un profesional de la lucha libre de la década de los ochenta que, tras sufrir un ataque cardíaco durante un combate exhibición, es instado por los médicos a abandonar las luchas.




La he visto de noche, solo. En parte porque quería disfrutar a Marisa Tomei, bailando semi desnuda y porque a esa hora, sólo un par de mosquitos se atreven a molestarme.


Dos cosas me sorprenden: La actuación de Mickey Rourke, en su mejor papel desde que interpretara a Marv en Sin City y la capacidad de su director de sacar adelante una película con tan poco presupuesto y con tantas cosas en contra (el estudio se negaba a aceptar a Rourke como protagonista) demostrando que aún hay arte en el cine.




Darren Aronofsky (requiem por un sueño), se vale de un estilo casi documental para seguir de cerca el descenso a los infiernos del ocaso de este personaje que vive (¿muere?) por y para lo único que sabe hacer. La cámara en mano, pegada casi siempre a la espalda de su protagonista, es el recurso que Aronofsky utiliza, para entonar esta brillante realización. Sin mucha pompa, con recursos súper limitados, pero con un magistral guión, Aronofsky nos relata un drama sin exageraciones.




Marisa Tomei y Evan Rachel Wood completan el reparto. Sí, sólo tres actores soportan el peso de la película, y lo hacen perfectamente bien.


El personaje de Tomei, una desnudista, también en declive, termina de reforzar la idea principal de la historia: La decadencia de las personas que cuyo trabajo y, por ende, vida, dependen de su estado físico.




Por supuesto, lo que más goce de toda la película.


Ya ganó el León de Oro del Festival de Cine de Venecia como Mejor Película, uniendo a la crítica y al público a su favor. Algo que no pasaba hace mucho tiempo. La Prensa Extranjera de Hollywood, le entrego el Globo de Oro a Mickey Rourke por su actuación. Sólo el sindicato de actores de Hollywood ha tomado un camino contrario.


Excelente la música. Una banda sonora cargada del rock ochentero de bandas como Quiet Riot, Scorpions, Cinderella y Guns N’ Roses, en donde Sweet Child O’ Mine suena apoteósica en la escena final donde el público clama por la salida al ring de Randy “Carnero” Robinson. 
 

Muy sencilla, muy humilde y humana, El Luchador (The Wrestler), es una gran historia de perdedores que, para mayor sufrimiento, tuvieron la desgracia de saborear la gloria.


Totalmente recomendable.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

JODER! que es esto! ----Mascara Sagrada!!!!!!!
xD....no hay un boton aca para reportarte? .... disculpa ahumm ahumm solo son celos.Un beso! (no hay mas)

DEARmente dijo...

Lluvia: ¿Sólo un beso? ¿No hay más? :(

Anónimo dijo...

Esta movie, va a quedar para una tarde de cinema, porque aun no la he visto.

W.

Anónimo dijo...

Así sea, W. Así sea.

Anónimo dijo...

Vi la película ayer y me parece estupenda. La historia es muy humana y real puesto que es muy propio de gente de este tipo (Luchadores, boxeadores, artistas de circo, toreros de segunda, etc..), acabar de esa manera tan triste: casi olvidados, en la ruina, y mal viviendo de sus glorias pasadas. Y que decir de la banda sonora..., en resumen, una película totalmente recomendable.